Tras la activación del Extintor de fuego colgante automático , el primer y más crucial paso es garantizar la seguridad de todas las personas en las cercanías. Debe tener lugar la evacuación inmediata, especialmente en entornos donde los riesgos de incendios pueden aumentar rápidamente. Cada persona en el área debe ser dirigida a la salida más segura y segura, lejos del fuego y el humo. Es esencial que el procedimiento de evacuación esté bien practicado y que se dan instrucciones claras a todos los ocupantes para evitar confusiones o pánico. Si es posible, designe puntos de ensamblaje fuera del edificio para tener en cuenta la seguridad de todos.
Después de garantizar que todo el personal sea evacuado de forma segura, es necesaria una evaluación rápida del estado actual del incendio. Esto incluye verificar si el extintor de incendios colgantes automáticos ha suprimido con éxito el fuego o si se requiere una intervención adicional. En esta etapa, uno debe verificar cualquier humo persistente, calor o pequeños bolsillos de fuego que pueden no haberse extinguido por completo. Si el fuego parece estar fuera, es importante asegurarse de que no haya riesgos ocultos, como materiales ardientes, que podrían reavivar el fuego. Si el incendio aún está activo o el extintor no abordó completamente la situación, se deben aplicar los métodos manuales de supresión de incendios, como el uso de extintores portátiles, o el departamento de bomberos local debe llamarse de inmediato.
Incluso si el fuego parece estar bajo control, aún pueden existir riesgos residuales. Estos incluyen la posibilidad de reencipir, así como la presencia de gases peligrosos o productos químicos liberados durante la combustión. Es esencial inspeccionar el área para obtener signos de acumulación de calor o áreas donde el fuego podría haberse extendido más allá de la zona de supresión inmediata. Se debe prestar especial atención a los espacios ocultos, como paredes, techos o equipos que pueden no haber sido expuestos directamente al supresor, pero que aún podrían representar un riesgo de rehisión de incendios. Asegurar que se eliminen todas las fuentes potenciales de peligro es esencial para una resolución completa del incidente.
En muchos casos, el extintor de incendios colgantes automáticos está diseñado para operar de forma autónoma, pero es esencial confirmar que un sistema de alarma externo se ha activado o activado manualmente para alertar el edificio o instalación más amplia de la emergencia de incendios. Esto asegurará que otros ocupantes del edificio estén al tanto de la situación y puedan evacuar si es necesario. Además, es crucial notificar a los servicios de incendios locales o los respondedores de emergencia, incluso si el incendio parece estar bajo control. Los bomberos tendrán la experiencia y el equipo para garantizar que el incendio se extingue por completo y que no haya más riesgo para el edificio o sus ocupantes.
Una vez que el fuego ha sido suficientemente suprimido, y después de confirmar que ha pasado el peligro inmediato, la ventilación se convierte en un paso clave para garantizar la seguridad del espacio. La ventilación del área es necesaria para eliminar el humo, el calor y los gases potencialmente dañinos (como el monóxido de carbono u otros humos tóxicos) que pueden haberse acumulado como resultado del fuego. Abra ventanas, puertas o utilice sistemas de ventilación mecánica (si está disponible) para borrar el aire y restaurar las condiciones seguras para el reingreso. En algunos casos, es posible que el equipo de ventilación sea necesario usarse para expulsar activamente el humo o los humos, particularmente si el incendio ocurrió en un espacio confinado o mal ventilado.
Después de confirmar que el área es segura, es fundamental inspeccionar el extintor de incendios colgantes automáticos para garantizar que funcionara correctamente. Esto incluye verificar el mecanismo de activación para obtener signos de daño o mal funcionamiento. Cualquier mal funcionamiento o falta de descarga del agente de supresión correctamente debe documentarse y abordarse de inmediato. Si el sistema es mecánico o electrónico, verifique que no hay piezas rotas o atascadas. Si el extintor se ha descargado por completo, evalúe si requiere rellenar o reemplazar al supresor. Las inspecciones regulares ayudan a garantizar que el sistema esté operativo y listo para uso futuro.